Merced A Ti, Fiel Guardián

Cuando me dijiste “vuelve”, despojé todo mi ser por ti.

Cuando mi corazón se encontraba solo y confundido…

arribó tu voz que me orientó por un camino lleno de luz.

De qué sirve caudales de oro y mujeres hermosas

si en la huerta de tu corazón no se cultiva el amor;

de qué sirve el alma si se halla vacía y prisionera

la mente perturbada donde solo habitan penas.

Es oportuno y ameno decir, merced a ti mi Dios

vivir nuevamente la comunión como tu hijo que soy,

encontrar lo que en mucho tiempo dejé de buscar,

congregarme a ti, mi maestro sabio y espiritual,

aquel ser Divino donde siempre hallaré felicidad.

Jamás olvidaré el día que la deidad se hiciera realidad

cuando mi alma naufragaba en completa oscuridad,

llegaste tú y le diste una nueva trayectoria espiritual,

ahora entiendo que tu palabra será mi única verdad:

te pido que alivies mi corazón y lo sacies de tu amor

para sentir algún día un nuevo gozo en mi interior.

De diversas maneras siempre sentiré tu infinita bondad,

donde quiera que me encuentre protegerme de la maldad,

del rebaño del pastor fui el cordero que un día se extravió,

soy solo un pobre infiel que busca de tu perdón.

-Merci, gracias, gratias, arigato, thanks, obrigado, grazie-

son infinidad de palabras con el objetivo único de alabarte,

infinitas gracias por ser nuestro fiel guardián protector,

que solamente será visto con los ojos del amor.

Merced a ti... Padre salvador.

Copyright 2012-05-30 Alejo is Fenix

Así Es Mi Mamá . . .

Si me preguntas por qué te amo, por qué declamo estos simples versos, 

diré sonriendo que ya lo sabes, que te doy gracias por compartir tu afecto.

Perdona el tiempo que olvidé abrazarte, apreciar tu esfuerzo y secar tu llanto. 

Espero comprendas cuánto te amo, cuánto te debo por enseñarme tanto, 

gracias por reprender mis actos, por ofrecerme siempre tu calor de madre. 

Aún siento tu luz cuando algún interrogante sesga de oscuridad mis pasos: 

abrigas mi corazón y sosiegas mis dudas cada vez que arriba el fracaso, 

me otorgas siempre una respuesta sabia cuando me encuentro cabizbajo, 

sonríes dulcemente como flor naciente que embellece todo a su paso. 

Te dedico esta composición que sólo quiere expresar lo mucho que te amo.

Noble confidente que con su presencia constante siempre me tiende la mano, 

tu aroma como frescas margaritas y tu piel con textura de un cálido verano. 

Sin alardear tanto, sólo quiero decirte que nadie remplazará tu espacio, 

tú que me llevaste en tu vientre y me has visto crecer a través de los años, 

a ti que me diste parte de tu vida y hoy solo pretendo retribuir tal acto. 

Madre, sabes que te llevo dentro de mí, que siempre te siento a mi lado, 

en cada día gris cuidas de mí y me das fuerzas para perdonar al malvado. 

De mi vida eres tú la única dueña, alimento de mi alma, reina de mi corazón, 

qué lentos pasan mis días cuando no estás cerca como ángel ¡protector!, 

son 365 días que doblan las campanas celebrando las maravillas de tu amor. 

Dichosamente eres nombre de Dios en labios y corazones de todos los hijos, 

soñadora silenciosa que guarda en su memoria los más preciados recuerdos. 

Madre, tú has sido y serás refugio en aquellos días que me encuentre abatido

cariño como el tuyo será difícil de encontrar que me proporcione gran alivio.

Siento que sólo tú me comprenderás, siento que sólo a ti podré adorar.

Basta con decir que he llorado en tus brazos con mi corazón mal herido,

junto a ti nada ha faltado y un amor sincero es lo que siempre me has compartido.

Hoy quiero decirte... gracias Mamá, solo tengo gratitud por tu amor incondicional.

Dios me otorgará la satisfacción de siempre contar con tu infinita bondad 

y saber que por siempre nadie remplazará tu lugar.

Copyright 2012-05-10 Alejo is Fenix